El sistema UroLift® es un tratamiento revolucionario que ofrece un alivio rápido y duradero de los molestos síntomas urinarios asociados con la HPB. UroLift®, cuya eficacia y seguridad han sido probadas clínicamente, puede mejorar los síntomas entre 3 y 4 veces más que los medicamentos. Además, los pacientes pueden retomar sus actividades normales pocos días después del
procedimiento.
El único tratamiento para la HPB en el que no se extirpa parte de la próstata, no se producen efectos adversos en la función sexual (preservando la erección y la eyaculación) y logrando mejoría en los síntomas.
¿Cómo funciona el sistema UroLift®?
La técnica quirúrgica menos invasiva actual para tratar los síntomas de la próstata hipertrófica (HBP) ofrece mínimos riesgos quirúrgicos puesto que el tejido agrandado de la próstata se retrae o se comprime mediante unos diminutos anclajes, sin proceder a cortes, resección de tejido prostático o calor, evitando así, en prácticamente la totalidad de los casos posibles efectos secundarios importantes para muchos pacientes como eyaculación retrógrada, incontinencia urinaria o la necesidad de colocar una bolsa para orinar unida a un catéter. Esta sencilla técnica permite la incorporación a la vida cotidiana en 24 h.
El pequeño implante UroLift está fabricado con materiales implantables de uso común. Generalmente se utilizan entre 4 y 5 implantes por paciente.
Preguntas y respuestas
¿Cuánto tardaré en sentirme mejor después del tratamiento con el sistema UroLift®?
Aunque los resultados varían según cada paciente, muchos hombres experimentan una mejoría de los síntomas de las vías urinarias inferiores tan solo 2 semanas después del procedimiento.
¿Se verá afectado mi funcionamiento sexual?
No se han informado casos de disfunción eréctil o eyaculatoria provocada por el tratamiento con el sistema UroLift®.
¿Qué ocurre durante el período de recuperación?
Después del procedimiento, los pacientes deben limitar sus actividades durante poco tiempo y pueden experimentar una mejoría de los síntomas en tan solo 2 semanas. Por lo general, no es necesario pasar la noche en el hospital y tampoco es necesaria la colocación de una sonda, pero es posible que sienta molestias al orinar durante el período de recuperación. Su médico lo analizará con usted.