Casi el 50% de los varones mayores de 60 años y aproximadamente el 80% de los mayores de 80 sufre hiperplasia benigna de próstata, un crecimiento benigno de esta glándula que comprime la uretra y provoca problemas a la hora de orinar, piedras en la vejiga e incluso fallos renales.
La fotovaporización prostática con láser de luz verde KTP es una nueva técnica mínimamente invasiva que supone una alternativa a la cirugía de resección transuretral de próstata, el tratamiento más habitual para tratar la hiperplasia benigna de próstata. Consiste en vaporizar el tejido prostático que comprime el conducto de la orina, de forma que el paciente recupere su capacidad de miccionar con normalidad.
Se trata de una técnica muy segura, que no produce sangrado y ofrece resultados tan eficaces como los obtenidos tras la cirugía convencional, con las ventajas de que el paciente permanece ingresado menos de 24h y puede retomar su vida normal a los 2 o 3 días. Además, se produce un alivio inmediato de los síntomas y los resultados se mantienen a largo plazo.